ARATZ: Miniaturas en el país de las tallas XL

| nº 89 - Octubre 2011

Texto: JOSEMA AZPEITIA. Fotografía: RITXAR TOLOSA

ARATZ: Miniaturas en el país de las tallas XL Imagen 1

El Aratz no es un bar de pintxos. Eso lo sabe cualquiera que conozca este restaurante y es lo primero que nos dijeron ellos cuando les comentamos que queríamos hacerles un reportaje en la sección “Comer de pintxos”. Pero su barra está llena de ellos. Y tienen una variedad que para sí la quisieran muchos establecimientos. El caso es que la sofisticación del mundo de la cocina en miniatura ha llevado a que muchos bares se acomplejen de su oferta cuando no hace mucho tiempo el mundo de los pintxos era mucho más simple y la gente no se comía tanto la cabeza. Además, tras acabar la degustación de las 9 banderillas que aparecen en la página contigua, puedo asegurarles que los bocados en miniatura de Aratz contienen mucho más de lo que puede parecer a simple vista.

Es lo que pasa con el Aratz, que tal vez le falta presumir un poco más de lo que hacen. Porque a simple vista la carta puede parecer la misma de cualquier otro asador de producto (Hongos a la plancha, Rodaballo a la parrilla, Chuletón de viejo...), pero cuando nos sentamos y profundizamos en ella nos damos cuenta de que este restaurante no es un asador más del montón, sino un local en el que el producto y la preparación se cuidan de una manera especial, como si les jorobara (algo de eso hay) que el cliente se fuera insatisfecho.

Los hermanos Zabaleta son el motor del restaurante. Funcionan como los morros y los callos, juntos pero no revueltos, porque la gran personalidad de ambos hace que si pasan demasiado tiempo en la misma habitación (o cocina), terminen saltando chispas. Es lo que tiene el amor fraternal.

Eso sí, los dos hermanos, Iker y Xabier, Xabier e Iker, tienen la misma filosofía de negocio: Buen género, buenas raciones, buenos vinos, buen servicio, buen precio. En esos cinco “buenos” se podría resumir la filosofía de este restaurante que abrieron en enero 1989, cuando todavía compartía el proyecto con ellos su hermano, el nunca olvidado Aitor Zabaleta.

Hagan la prueba y pidan cuatro platos para compartir. Empiecen por unos hongos a la plancha. Aquí se miman de manera especial. Les servirán los tallos por una parte, las txapelas por otra, los espolvorearán con pedacitos de foie fresco y los acompañarán (en medio, sin regarlos) de una salsita agridulce que les viene como anillo al dedo. Sigan con una ensaladita de marisco como la que aparece en la foto, una ensalada como debe de ser, con bien de marisco, sin bobadas, y como todas las raciones de este local, de talla XL.

Sigan con un buen pescado a la parrilla. El rodaballo, por ejemplo, es traído por el mismo proveedor de algunos de los mejores asadores de Getaria, y se nota. Pero si quieren disfrutar, un consejo personal: pidan un lenguado (la mejor temporada es de enero a abril) y alucinen.

Finalmente, (es obligatorio que les quede sitio), hay que probar la carne. La chuleta se cuida como debe de ser en este asador y de cuando en cuando, si tenemos suerte, podremos disfrutar de auténtica carne de viejo criada en las faldas de Igeldo.

Terminen con un sorbete de café helado, tan frío que el día que lo probó David de Jorge dijo que le entró “la punzada del guajiro”.

Y de ahí, a casa a dormir la siesta. Ya vendrán otro día a probar los pintxos.

ARATZ ERRETEGIA
Igara bidea, 15 DONOSTIA. Tf: 943 21 92 04
www.restaurantearatz.com

NUESTRA DEGUSTACIÓN: PINTXOS RICOS, GENEROSOS Y CONSISTENTES

La oferta de pintxos de Aratz no es la misma los días laborables que el fin de semana. De lunes a viernes dominan la barra los pintxos más consistentes, algo lógico si tenemos en cuenta que estamos en una zona eminentemente industrial: Tortilla de patata, Tortilla de bacalao, Lomo... presentados a la manera de mini-bocadillos. Por la tarde hacen la entrada las brochetas y pintxos más finos, y el fin de semana los bocados son más cuidados y coloridos. En cualquier caso, a todas horas hay algo para picotear en este bar y los pintxos de cocina (foie, txipis, carne con tomate...) están disponibles todos los días.